miércoles, 26 de noviembre de 2008

Todo se transforma

Tu beso se hizo calor,
luego el calor, movimiento,
luego gota de sudor
que se hizo vapor,luego viento
que en un rincón de La Rioja
movió el aspa de un molino
mientras se pisaba el vino
que bebió tu boca roja.

Tu boca roja en la mía,
la copa que gira en mi mano,
y mientras el vino caía
supe que de algún lejano
rincón de otra galaxia,
el amor que me darías,
transformado, volvería
un día a darte las gracias.

Cada uno da lo que recibe
y luego recibe lo que da,
nada es más simple
,no hay otra norma:
nada se pierde,todo se transforma.

El vino que pagué yo,
con aquel euro italiano
que había estado en un vagón
antes de estar en mi mano,
y antes de eso en Torino,
y antes de Torino, en Prato,
donde hicieron mi zapato
sobre el que caería el vino.

Zapato que en unas horas
buscaré bajo tu cama
con las luces de la aurora,
junto a tus sandalias planas
que compraste aquella vez
en Salvador de Bahía,
donde a otro diste el amor
que hoy yo te devolvería......

Cada uno da lo que recibe
y luego recibe lo que da,
nada es más simple,
no hay otra norma:
nada se pierde,
todo se transforma.

Jorge Drexler

sábado, 22 de noviembre de 2008


Pero me acuerdo de ti
Y otra vez pierdo la calma
Pero me acuerdo de ti
Y se me desgarra el alma
Pero me acuerdo de t
iY se borra mi sonrisa
Pero me acuerdo de ti
Y mi mundo se hace trizas

Yo, yo no me doy por vencido
Yo quiero un mundo contigo
Juro que vale la pena esperar,
y esperar y esperar un suspiro
Una señal del destino
No me canso, no me rindo,
no me doy por vencido

domingo, 9 de noviembre de 2008



Fue una sentencia absurda,
rotunda y contundente:
dijeron que las hadas
no eran como gente.
Que no podía verlas,
hablarles o tocarlas.
Que solo eran de cuentos
y no debía aguardarlas.
Que por más que buscara
en rosas y jazmines,
las hadas no vivían
ocultas en jardines.
Y que mi idea vana
de las pequeñas cosas
no hacía que las hadas
se vuelvan mariposas.
Pero no he de creer
lo que me estan diciendo:
Si no existen las hadas:
¿Porqué estoy escribiendo?

sábado, 1 de noviembre de 2008

si supieras....


Si supieras cuánto
tiempo gasto al día para no pensar en ti.
Si supieras
cuánto daño me hace tu sonrisa en mi cabeza.
Y ahora que sé
que no intereso a tus caricias,
cómo pude demostrarle a tu ironía
que mi vida sin tus huesos era infierno.
Y yo aún estoy
colgada de aquel día que miraste atrás
y luego tú, sin un quiebro en tu voz,
me dijiste adiós.

dónde estará?


En qué estrella estará,
para cuidar de él.
Me pasaré la vida sin dormir.
En qué estrella estará
mi dulce corazón,
por qué me roba la vida y la razón.
Dime quién vendrá
a ocupar su lugar,
por qué mis sueños se rompen de golpe.